El hecho de que muchas orquídeas también tengan propiedades suculentas no suele ser evidente a primera vista. Pueden almacenar agua en sus hojas, pseudobulbos o raíces.
Esta propiedad les permite sobrevivir a los periodos secos, que también se dan en las regiones tropicales y subtropicales. Gracias a su almacenamiento de agua integrado, pueden crecer sin sustrato, por ejemplo, sentados en los árboles.

Se dice que la familia de las orquídeas (Orchidaceae) incluye entre 15.000 y 30.000 especies (fuente). Para extenderse con tanto éxito, las orquídeas han tenido que adaptarse a hábitats muy diferentes. No sólo colonizan regiones cálidas, sino también templadas o frías. Algunas pueden crecer bajo el agua, otras se posan en piedras o árboles.

¿Dónde almacenan el agua las orquídeas?
Para ello se utilizan varias partes de la planta. Algunas especies utilizan pseudobulbos. Pueden tener forma de tubérculo o bulbo, o de tallo. Las hojas crecen sobre o desde ellas, pero suelen desprenderse después de la floración. De modo que sólo queda el pseudobulbo, como depósito de agua y nutrientes.

Los pseudobulbos ofrecen otra ventaja: funcionan como esquejes y pueden volver a brotar. En caso de que la orquídea se dañe o se caiga del árbol.

No todas las orquídeas utilizan pseudobulbos para almacenar agua. Algunas especies utilizan para ello raíces u hojas gruesas y carnosas. Por lo tanto, también pueden crecer en lugares soleados o en suelos bien drenados y pedregosos.
